El Colegio de Farmacéuticos de Málaga ofrece una serie de consejos a la ciudadanía para evitar las picaduras de insectos durante el verano, una prevención especialmente necesaria en zonas costeras y montañosas de interior como las que pueden encontrarse en la provincia de Málaga.
Antes de nada, “es recomendable consultar con tu farmacéutico qué repelente puede venirte mejor según el insecto, la actividad a realizar, las características personales, etc., puesto que estos productos son eficaces para evitar picaduras de cualquier tipo”, explica Diego Rodríguez, secretario del Colegio de Farmacéuticos de Málaga.
En muchas ocasiones, este tipo de productos suelen adquirirse sin el consejo farmacéutico, lo que provoca que se escojan opciones inadecuadas y poco efectivas para cada persona y caso. “Los farmacéuticos contamos con la preparación necesaria para entender a la perfección las indicaciones de cada repelente y recomendar el que más se ajuste a las necesidades de cada persona. Invitamos a los malagueños a que nos pregunten y nos consulten cualquier duda, estaremos encantados de atenderles”, asegura el secretario de la institución colegial.
Además, existen diferentes modelos de repelentes y su modo de uso u aplicación varía. Por ejemplo, las clásicas lociones en spray no deben aplicarse en zonas sensibles como los ojos y el tiempo de duración dependerá de la marca y composición. En caso de que la picadura ya se haya producido, el farmacéutico también podrá guiar al paciente en su proceso de recuperación para que sea lo más liviano posible y no suponga complicaciones mayores.
Más allá de la indicación farmacéutica, desde el Colegio de Farmacéuticos de Málaga recomiendan a la población seguir una serie de pautas generales para prevenir las picaduras de insectos. Entre ellas, procurar usar ropa que cubra la piel a partir de la tarde-noche, mantener las luces apagadas durante la noche en la medida de lo posible o evitar las zonas u objetos donde suele acumularse agua como los platos de maceta o los bebederos de las mascotas. Con respecto a las garrapatas, el Colegio señala que hay una mayor presencia de estos insectos debido al aumento de las temperaturas y a la mayor duración de los meses cálidos de los últimos años, por lo que recomienda tener especial cuidado.
Las picaduras de mosquitos pueden transmitir enfermedades como la Fiebre del Nilo Occidental, que en algunos casos puede llegar a suponer cuadros graves. La mayoría de las infecciones suelen ser asintomáticas. No obstante, en personas de mayor riesgo como mayores de 50 años e inmunodeprimidas puede causar encefalitis, meningoencefalitis o meningitis. En el caso de las picaduras de garrapata, una de las enfermedades que pueden transmitir y causar mayores problemas es la Fiebre Hemorrágica Crimea-Congo. Los síntomas suelen presentarse de forma repentina, siendo los más comunes fiebre, dolor muscular, hipersensibilidad a la luz, lumbago y mareos. Incluso, pueden darse náuseas, vómitos y diarrea. Ante estas situaciones más graves, desde el Colegio de Farmacéuticos de Málaga se insta a acudir inmediatamente al médico.